OLVIDAR PARA VIVIR

Me levanto,
preparo el café,
no voy a clase hoy,
necesito descansar
y hacerme preguntas
¿Qué es
mi jodida vida?
Y veo que
últimamente
es una dualidad
entre ansiedad
y depresiones,
olvido para vivir
o vivo para olvidar,
no lo sé
¿Por qué
no es lo mismo?
Adiós los malos momentos,
pero y si
sin querer
olvido lo bueno,
¿Qué haré?
Mi corazón
sigue latiendo;
es lo importante,
sigue recordando,
sigue sumando,
sigue saltando
para escapar
de la realidad.
Y el café
ya está helado,
mientras tu recuerdo
desaparece,
y entra
una nueva sonrisa,
la mejor,
la mía.
No vivo para olvidar,
ni olvido para vivir
sino que
me olvidé de vivir,
me olvidé cómo vivir,
me recuerdo cómo vivir;
será difícil,
pero lo recordaré.